Hemos empezado el año con buenos humos o, al menos, con la esperanza de que se pueda convivir en espacios más limpios de humo de cigarrillos.
Las modificaciones introducidas por la Ley 42/2010, de 30 de diciembre,en la Ley 28/2005 sobre medidas frente al tabaquismo nos proporciona un espacio que aporta las siguientes ventajas:
-Posibilita la protección efectiva de los no fumadores en los locales de uso público, sean privados o públicos.
-Facilita el abandono del hábito de fumar en los fumadores.
-Contribuye a que los fumadores en la fase de abandono del tabaquismo se consoliden en la decisión tomada y pasen a ser exfumadores.
-Disocia ciertas actividades que tradicionalmente están ligadas al consumo de tabaco.
-Promociona el estilo de vida de no fumador como la opción más normal.
-Contribuye a prevenir el inicio del consumo de cigarrillos en los jóvenes.
-Protege a los trabajadores de hostelería y lugares donde estaba permitido fumar de las enfermedades producidas por la aspiración de humo de cigarrillos en los lugares de trabajo.
-Crea ambientes limpios de humo de tabaco aptos para todos: fumadores, no fumadores, mayores, pequeños, ….
Esta Ley que ha sido impulsada por la sociedad civil desde sus orígenes, porque los políticos habrían sido más reticentes a ponerla en marcha si hubieran tenido menor apoyo popular, ha entrado en vigor sin apenas incidencias. Las denuncias que han sido presentadas constituyen una cifra muy pequeña si tenemos en cuenta que el nº de fumadores en España se estima en 10 millones.
De todos modos, debemos felicitarnos todos por haber avanzado en conseguir unos espacios que nos posibilitan realizar nuestra vida cotidiana con menos riesgo para la salud.
Y tú, ¿qué opinas?
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